Jan Lievens (Leiden, 24 de octubre de 1607 – Ámsterdam, 4 de junio de 1674) fue un pintor holandés. Su obra no fue ajena al vino. Esto lo podemos comprobar en “Retrato de Jan Lievens como bebedor con un vaso y una jarra”, fechado en la década de 1660.

Retrato de Jan Lievens como bebedor con un vaso y una jarra (1660s), de Jan Lievens

Pintor de retratos, cuadros de género y temas religiosos. Era hijo de un sombrerero de Leiden. Comenzó su formación a la temprana edad de ocho años, en el taller de Joris van Schooten, en su ciudad natal. Entre 1617 y 1619 continuó sus estudios en Amsterdam con el pintor de historia Pieter Lastman, cuya influencia se aprecia claramente en sus primeras obras. Regresó a Leiden hacia 1625, estableciéndose como maestro independiente. Durante los siguientes años trabajó en estrecho contacto con Rembrandt, a quien había conocido en Amsterdam, en el taller de Lastman, y con quien incluso compartió estudio. Las obras de este periodo están tan vinculadas al estilo de Rembrandt que en algún momento llegan a confundirse.

En 1632 se trasladó a Londres, donde trabajó para la corte británica, realizando retratos de los miembros de la familia real, de los que no se ha conservado ninguno. En Inglaterra conoció a Anton van Dyck, cuyo estilo asimiló a partir de aquel momento. En 1635 está documentado en Amberes, donde se registró en el gremio de San Lucas de la ciudad. Durante su estancia en Flandes, su pintura abandonó toda reminiscencia de su etapa de Leiden, para adoptar completamente el estilo barroco flamenco de Van Dyck, Rubens y Adriaen Brouwer. En 1638 contrajo matrimonio en esta ciudad con Susana de Nole, hija del escultor Andries Colyn de Nole. Volvió a Holanda en 1644 y se estableció en Amsterdam. Dos años más tarde se casó en segundas nupcias con Cornelia de Bray, hija del pintor de Haarlem Jan de Bray. Tras su vuelta, Lievens recibió numerosos e importantes encargos de cuadros de historia y alegorías, como los que realizó para la Oranjezaal, en Huis ten Bosch, La Haya, o para el nuevo Stadhuis en el Dam, hoy Palacio Real, Amsterdam. Composiciones todas ellas en las que se aprecia la elegancia, la suavidad y el colorido claro de su etapa flamenca. Durante estos años también ejecutó un gran número de retratos; sus pinturas adquirieron tal fama que viajó a Berlín, Cleves, La Haya o Leiden para ejecutar sus encargos. Murió en Amsterdam en 1674.

Sufrió dificultades financieras importantes, por lo que a su muerte, su familia evitó reclamar cualquier herencia por temor a las deudas. Una de sus pinturas más peculiares, Susana y los viejos, se da por perdida, si bien se conoce por un grabado de Jan van Vliet. El único ejemplo conocido de Lievens en España es un Paisaje con el descanso en la huida a Egipto, en el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid.

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Un artículo de Alberto Muñoz Moral
Responsable de Comunicación de Licores Reyes