Mar de Frades apuesta de nuevo por una mirada diferente al Atlántico con el lanzamiento de Finca Monteveiga. Este nuevo vino, que llega con el objetivo de aportar una nueva interpretación de la Albariño, nace en el corazón de la Ribera del Río Ulla, un paisaje diferente y diferencial ubicado a escasos kilómetros de la costa gallega. Finca Monteveiga es un vino elaborado 100% con uvas de la variedad Albariño cultivadas en el límite norte de la Denominación de Origen Rías Baixas, en un escenario rodeado de montañas donde apenas se produce el 1,5% del Albariño de la región, y en el que el clima continental se da la mano con el Atlántico gracias a la presencia del Ulla. Un hermoso viñedo enclavado entre colinas bajas y suavemente onduladas, con pequeños valles y una ligera pendiente que supone el inmejorable escenario para el nacimiento de un vino único, extraordinariamente complejo en aromas, donde la Albariño muestra su potencial de longevidad, transmitiendo su origen salino y aromático de una manera diferente gracias a sus 15 meses de crianza sobre lías.
Un paisaje encapsulado en una botella, que se mantiene fiel a su icónica identidad azul, y que aclara su etiqueta, reflejando la representación del valle en el que serpentean las aguas del río Ulla y entre sus brumas matinales en las que aparecen las hileras de viña de Finca Monteveiga.
Mar de Frades Finca Monteveiga llega al mercado con una muy limitada producción 2.700 botellas y con un precio de venta al público de 35€.
Nueva imagen para Finca Valiñas
El lanzamiento de Finca Monteveiga coincide además con la llegada de una nueva imagen para el vino icónico de Mar de Frades, Finca Valiñas, uno de los blancos españoles más elegantes y sofisticados y que nace en el viñedo que rodea a la propia bodega Mar de Frades en el corazón del Valle del Salnés. Nueva imagen para un vino que mantiene inalterables sus señas de identidad y su origen en un viñedo de más de 40 años frente a la Ría de Arousa. Finca Valiñas no cambia su perfil enológico, pero sí evoluciona su imagen con una muy distinguible botella azul (similar a la de Finca Monteveiga) reinterpretando el paisaje gallego, y completando por ahora la colección de vinos de finca de Mar de Frades.
