Miguel de los Santos Jadraque y Sánchez de Ocaña (Valladolid, 5 de julio de 1840-Madrid, 10 de enero de 1919) fue un pintor español y un destacado retratista. Su obra no fue ajena al vino. Esto lo podemos comprobar en “Don Quijote enfermo”, fechado en 1883.

Cursó sus estudios en pinturas en la Escuela Provincial de Bellas Artes de Valladolid bajo la tutela de los maestros Agapito López Sanromán y Joaquín Espalter y más tarde pasó a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en 1864 fue premiado por dicha academia. En ese mismo año, también fue premiado en su tierra por la Diputación de Valladolid, gracias a un lienzo cuyo argumento se vincula con la historia local del conde Ansúrez.

En 1869, de nuevo la Diputación le concedió una pensión para perfeccionar sus estudios, con la que fue becado a Roma y participó en la exposición nacional de pintura donde logró varios premios de tercera clase y uno de segundo. Su mayor reconocimiento lo logró en la exposición de Viena donde logró un primer premio con la obra Presentación del Cardenal Cisneros a Isabel la Católica por el Cardenal Mendoza. También en París logró reconocimiento recibiendo la medalla del segundo premio en 1878 por la obra Carlos V en Yuste.